El gluten es una proteína encontrada en trigo, cebada, avena y centeno, y en un sin número
de productos alimenticios como el pan y la pasta, que contienen estos granos.
Gradualmente daña los intestinos de las personas...
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Las asociaciones de celíacos que se encuentran repartidas por todo el país constituyen tu mejor fuente de información sobre el tratamiento de esta enfermedad.
Ellos te asesorarán sobre cómo llevar una vida perfectamente normal, podrás participar en una gran variedad de cursos y relacionarte con gente que entiende perfectamente la problemática de una vida sin gluten.
Comer SIN GLUTEN es más sano...
El gluten es una proteína encontrada en trigo, cebada, avena y centeno, y en un sin número
de productos alimenticios como el pan y la pasta, que contienen estos granos.
Gradualmente daña los intestinos de las personas con enfermedad celiaca. Evita la
absorción de vitaminas y minerales y desencadena una serie de problemas de salud
relacionados, que pueden incluir fatiga y daños en la piel.
De hecho, los expertos ahora creen que la enfermedad celiaca representa solamente un
extremo del amplio espectro de la intolerancia al gluten que incluye a millones de
personas con menos severas – pero problemáticas – reacciones a esa proteína.
Aunque la enfermedad celiaca afecta a aproximadamente al 1% de la población, los expertos estiman
que alrededor de 10% tiene una condición relacionada y pobremente comprendida
conocida como intolerancia al gluten no celiaca o sensibilidad al gluten.
La intolerancia al gluten de cualquier tipo – incluyendo a la enfermedad celiaca – a
menudo no es diagnosticada o es mal diagnosticada debido a que se manifiesta en muchos
y confusos modos que pueden desconcertar a los médicos.
Las personas con la enfermedad celiaca y sensibilidad al gluten usualmente sufren de dolores de estómago,
gases y diarrea, al igual que las personas que sufren del síndrome de colon irritable.
Los pacientes celiacos también pueden desarrollar dolores de cabeza, hormigueos, fatiga,
dolor muscular, erupciones cutáneas, dolor en las articulaciones y otros síntomas, debido
a que el ataque autoinmune a la raíz de la enfermedad gradualmente erosiona las paredes
del intestino, provocando una baja absorción de hierro, ácido fólico y otros nutrientes que
afectan todo, desde la energía hasta la función cerebral.
Un retraso en el diagnóstico o no seguir la dieta, aumenta el riesgo de trastornos autoinmunitarios, osteoporosis, cáncer,
anemia, hipoglucemia, infertilidad, abortos, migraña ...
La sensibilidad al gluten, puede ser mal diagnosticada por lo difícil de detectar al no
aparecer muy claros los marcadores de la celiaquía y no tener un análisis médico
definitivo”, dice Daniel Leffler, médico y profesor asistente de medicina en la Universidad
de Harvard.
La gente que está en este grupo, exhibe los síntomas clásicos de la
enfermedad celiaca pero no tiene daño intestinal detectable, o eso parece, y sus análisis
resultan negativos para ciertos anticuerpos clave.
El sistema inmunitario es el encargado de enfrentarse a las distintas enfermedades.
La mejor forma de tener el sistema inmunitario elevado es una alimentación adecuada.
Seguir una dieta SIN GLUTEN hará que tu organismo no sufra un desgaste en el sistema
inmunológico para transformar los alimentos ingeridos en nutrientes.
Te hará percibir sus efectos beneficiosos de forma inmediata; en solo unos días notarás el intestino menos
inflamado y que van desapareciendo los gases intestinales, diarreas y dolores, como así
también toda la demás sintomatología relacionada, por eso... COMER SIN GLUTEN ES MAS
SANO...